Buenos Aires.La temperatura subió a un nivel extremo, sin embargo vino la lluvia para bajarla de nuevo. Por segundo fin de semana consecutivo se pronosticó lluvia, pero a diferencia del anterior fin de semana el torrencial de agua que cayó en este lleno los campos de béisbol para así cancelar los partidos de la jornada en las diferentes Ligas.
Con el deseo de jugar muchos fueron a algunos parques a practicar, y como dice una cancion de merengue en la Reública Dominicana, » la lluvia no daña mi fiesta», desafiaron el agua y los rayos para tomar el bate, unas pelotas y entrar al campo.
Con la cancelación de varios partidos de la fecha tendremos béisbol para rato ahora cuando llegue el calor de verano.